Noe En nuestro último día recogimos las maletas para volver a España, pero antes haríamos una última parada para descubrir otro lugar de Portugal. En esta entrada te hablaré de mi viaje a Évora.
Nos despedimos de Sesimbra
13 de mayo de 2018
El domingo por la mañana nos levantamos temprano para recoger y limpiar toda la casa. Como no nos queríamos despedir de Sesimbra tan pronto, nos dimos un paseo por la playa por última vez. Sobre las 12 partimos en coche de vuelta a España.
Recuerdo que todos estábamos muy cansados, los que iban en la parte trasera del coche se quedaron dormidos poco tiempo después. Yo, como copiloto, me encargué de mantener bien despierta a la conductora. Así pude también disfrutar de los paisajes de Portugal.
Parada en Évora
Sobre las 15:00 llegamos a Évora, donde hicimos una parada de descanso y un poco de turismo. Lo primero que hicimos fue visitar las ruinas de su templo romano. Tras verlo dimos un paseo por sus calles, no sé si era por la hora o porque se trata de un pueblo pequeño que no había nadie. El ambiente me recordaba mucho a España.
Después, buscamos un sitio para comer y acabamos comiendo pescado. No recuerdo exactamente el qué ni dónde fue, solo sé que pedimos algo variado para compartir entre todos y que estaba bueno.
Seguimos paseando un poco más por Évora. Vimos su catedral por fuera y después de ello, decidimos volver a casa porque estábamos agotados. Me hubiera gustado ver la Capilla de los Huesos pero supongo que tendrá que ser en otra ocasión.
Y hasta aquí mi viaje a Évora y mi viaje a Portugal.
Mi reflexión
Portugal me gustó mucho más de lo que esperaba. Jamás creí que encontraría uno de mis lugares favoritos del mundo (Sintra) justo al lado de España. Siento que el viaje fue muy corto y que apenas conocí el país, por lo que deseo volver en un futuro y seguir descubriendo todas las maravillas que tiene.
Fin
