En Japón hay muchísimos puentes, pero hay específicamente tres que destacan por encima de los demás. Aquí te voy a presentar los que se consideran los tres puentes más singulares de Japón.
Japón es conocido por tener muchas listas en las que destacan lugares específicos del país como los 3 paisajes más bellos o los 3 mejores castillos. Desde que se creó la primera lista en el año 1643 (que fue la de los paisajes), han ido surgiendo con los años muchas otras. Aquí quiero mostrarte los que se consideran los tres puentes más singulares del país, a los cuales he tenido oportunidad de visitar.
Puente Saruhashi, Otsuki
El puente Saruhashi (猿橋) es seguramente el más desconocido de esta lista. Se encuentra en la ciudad de Otsuki, en la Prefectura de Yamanashi. Cruza el río Sagami con sus 30,9 metros de largo y 31 metros de altura, y aunque se construyó originalmente en madera, la estructura original fue reforzada con acero. Se trata de un puente colgante cuyo soporte recae en unos pilares de madera superpuestos incrustados en la roca. Lo más llamativo es que su estructura cuenta con tejados para protegerlo de la lluvia.
En el momento de su construcción fue tan alabado que su técnica comenzó a replicarse en otras partes del país. Cabe destacar que es el único de esta lista que se puede cruzar de manera gratuita.
Puente Kintai, Iwakuni
El puente Kintai (錦帯橋) fue construido en el año 1673 para unir el castillo con la ciudad de Iwakuni. Atraviesa el río Nishikigawa que tiene una envergadura de 200 metros. El anterior puente quedó arrasado por unas inundaciones por lo que se envió a un arquitecto a investigar el Puente Saruhashi. Como sería imposible hacer algo similar pues la distancia era mucha, se optó por arcos de madera sujetos por pilares de piedra.
Puedes leer sobre mi visita a este puente en esta entrada de mi diario.
Puente Shinkyo, Nikko
Este es tal vez el menos impresionante de la lista. El puente Shinkyo (神橋), situado en la ciudad de Nikko, mezcla dos estilos de construcción. Por un lado, el mismo usado en el puente Saruhashi, y por otro, el puente de vigas. Se creó en 1636 durante una importante reconstrucción del Santuario Toshogu. Antiguamente se usaba también para rituales sintoístas.
Puedes leer la historia de mi visita a este puente en esta entrada de mi diario.
¿Qué os ha parecido esta lista? ¿Estáis de acuerdo? ¿Habéis visitado alguno de estos puentes? ¿Cuál os ha impresionado más?