En nuestro segundo día por tierras irlandesas visitaríamos un lugar cercano a la ciudad de Dublín. Aunque el tiempo no nos acompañó fue una excursión inolvidable. Aquí te dejo mi viaje a Glendalough.
Comienza el tour
15 de abril de 2018
Nos levantamos muy temprano para poner rumbo a la calle O’Connell donde nos recogería nuestro guía a las 9:30. Habíamos contratado un tour para que nos llevara a los puntos más emblemáticos del valle de Glendalough.
Durante el trayecto, el guía español nos iba explicando algunos detalles de Irlanda como que es un país muy llano y bajo. Algo muy distinto a como me imaginaba.
Una hora después ya habíamos llegado al primer punto del viaje. El autobús nos dejó en el parking y tuvimos que caminar por sus valles verdes hasta llegar a un asentamiento monástico medieval. Era la primera vez que veía un lugar como este.
Nos estuvo explicando muchas curiosidades históricas sobre Glendalough, de las que desgraciadamente casi ya no recuerdo nada. Solo recuerdo la enorme torre, un punto emblemático, el cementerio y las ruinas de la catedral. Sentía que me había metido en una película medieval. Fue una experiencia increíble pasear por esta zona.
El valle
Seguimos caminando hasta llegar a los dos lagos. El primero fue el Lago Inferior (Lower Lake), que aunque era bonito, me pareció un simple largo normal. Además, hacía mal tiempo, estaba todo nublado a punto de ponerse a llover, por lo que la vista no fue del todo buena.
Nos dirigimos después al Lago Superior (Higher Lake). Tengo que reconocer que al menos, el paisaje, me gustó bastante. Tal vez porque nunca antes había visto tanto verde en mi vida.
Una vez en el lago, comenzó a llover. Había visto fotografías de este lugar y se veía impresionante, pero con la lluvia apenas se apreciaba. Aún así, este lago me pareció muchísimo más bonito porque se encuentra rodeado de montañas.
Los jardines de Powerscourt
Hacia las 13:00 llegamos a nuestro siguiente destino: los jardines de Powerscourt. Aquí ya llovía bastante, pero dimos un paseo igualmente por los increíbles y grandes jardines que han sido testigos de las grabaciones de varias películas.
Me encantó perderme por sus terrenos e ir descubriendo las distintas partes que componen estos jardines, como el jardín japonés. Destaco también unos enormes árboles que encontramos en el camino, y la torre Pepperpot.
Mi primer pub irlandés
En torno a las 14:30 llegamos a este pub donde comeríamos un delicioso estofado de ternera, la típica soup of the day con su pan y una tarta. Pero sin duda, lo mejor de este lugar, fue el ambiente. Había un espectáculo en vivo. Nos tocaron música irlandesa con instrumentos tradicionales. Una experiencia que recomiendo totalmente.
Después de esto acabaría el tour, y con ello, mi viaje a Glendalough. Nos dejaron de nuevo en la calle O’Connell de Dublín sobre las 18:00. Paseamos un poco por esta calle y vimos el famoso The Spire. Tras ello, volvimos a casa a descansar. Estábamos agotados.
El día siguiente lo dedicaríamos a conocer Dublín:
Irlanda día 3: descubriendo Dublín