Noe Hitachinaka (ひたちなか) es una ciudad que pertenece a la prefectura de Ibaraki, Japón. Es especialmente conocida por su parque costero en el que destacan campos de flores azules o rojas dependiendo de la temporada. Pero Hitachinaka es mucho más que eso, descúbrelo con esta guía de viaje a Hitachinaka.
Cómo llegar
Desde Tokyo:
Desde la estación de trenes de Tokyo sale un tren express llamado «HITACHI and TOKIWA» dirección estación de Katsuta (Hitachinaka). El trayecto dura 1 hora y 30 minutos y cuesta 4000 yenes.
Mapa
Qué ver
Hitachinaka es una ciudad muy pequeña pero cuyos puntos turísticos están muy separados entre sí. Lo ideal es usar el transporte urbano para llegar a todos los sitios.
Parque costero Hitachi (国営ひたち海浜公園)
- 450 yenes (tarifa normal)
- 800 yenes (durante la temporada de nemophilas y coquias)
- 9:30 ~ 17:00 (marzo ~ finales de julio, septiembre y octubre)
- 9:30 ~ 18:00 (finales de julio ~ agosto)
- 9:30 ~ 16:30 (noviembre ~ febrero)
Se trata de un parque estatal de 190 hectáreas en el que se pueden encontrar una amplia variedad de flores (dependiendo de la época) como azafranes, narcisos, tulipanes, margaritas, girasoles, rosas… Aunque la más famosa son las nemophilas que inundan el campo de color azul (en primavera) y las coquias de color rojo (otoño). Si quieres saber qué flores hay en cada época, te invito a leer su página web oficial.
Además de las flores se pueden encontrar un parque de atracciones, pista de ciclismo, zona de barbacoa, muchos restaurantes y hasta residencias familiares que datan entre el año 1600 y 1700. Está permitido entrar con mascota por lo que es muy común ver a gente con sus perros. También puedes alquilar una bicicleta.
Santuario Hoshiimo (ほしいも神社)
Este santuario fue construido en 2019. Su nombre significa «batata seca» un tipo de batata dulce que se produce en esta ciudad convirtiendo en esta prefectura en la mayor exportadora. Su nombre también puede significar «Lo que quieras» (ほしいもの) por lo que este santuario está ligado a conseguir todo lo que te propongas.
Lo más llamativo de este santuario son sus puertas torii de color dorado cuando normalmente son rojas. Además encontramos dos árboles llamados «yin y yang» cuya apariencia recuerda a los genitales femeninos y masculinos. Muchas parejas vienen a rezar aquí por su matrimonio y por un buen parto.
Santuario Sakatsura Isozaki (酒列磯前神社)
Este santuario fue construido en el año 856. Aquí se consagra a Sukuhikona-no-Mikoto, uno de los tres dioses de la creación en la mitología japonesa. Está relacionado con la vida saludable y la curación de enfermedades. Para acceder al santuario se debe cruzar un precioso túnel de árboles.
Se cree también que este santuario da buena suerte en las loterías ya que varias personas han ganado grandes premios tras visitarlo. Existe un ritual para atraer a la buena suerte, para ello, primero debes orar deseando atraer la suerte, luego comprar un amuleto de la suerte y por último acariciar la estatua de una tortuga que encontrarás nada más acceder al templo.
Restos de la Villa Ihinkaku (夤賓閣跡)
Fue una villa construida por orden de Mitsukuni Tokugawa (1628 – 1701) en 1698, aunque se destruyó completamente tras un incendio en 1864. Hoy en día se ha construido el Parque Minato (湊公園) en este sitio con carteles informativos de la villa.
Túmulo de Torazuka (虎塚古墳)
En 1973 se descubrió tras unas excavaciones este túmulo funerario en forma de ojo de cerradura. Tiene una longitud de 56.5 metros y fue construido a principios del siglo VII. Lo más interesante es que en su interior aún se aprecian las pintura que se hicieron en las paredes.
La tumba solo abre en dos ocasiones al año (primavera y otoño) durante poco tiempo, por lo que recomiendo visitar la web oficial del Centro de Investigación de Bienes Culturales Enterrados en el que avisan siempre de las fechas.
Centro de Investigación de Bienes Culturales Enterrados (埋蔵文化財調査センター)
- Gratis
- 9:30 ~ 17:00 (lunes cerrado)
Un centro de investigación en el que se exponen los hallazgos arqueológicos excavados en la ciudad. Lo más interesante es que expone una figura de terracota de estilo haniwa con un bebé en brazos, siendo el único encontrado en Japón. También se puede ver una réplica del mural del Túmulo de Torazuka.
Cuevas de Jugoro-ana (十五郎穴横穴墓群)
Se trata de un conjunto de cuevas usadas como tumbas hace más de 1200 años. En su interior, hoy en día vacío, se han encontrado ajuares funerarios como cerámica, espadas y cuentas de magatama. Su nombre «Jugoro-ana» proviene de una leyenda que decía que los hermanos Soga vivieron un tiempo aquí.
Los hermanos Soga fueron dos hombres que cometieron venganza acabando con la vida del hombre que mató a su padre en 1193. Se trata de una de las historia más famosas de venganza de Japón.
Para llegar hasta aquí se debe atravesar el bosque que hay cerca del Túmulo de Torazuka. Hay señalizaciones así que es mejor guiarse por ellas que por Google Maps (el cual te dice que des un rodeo).
Casa Takeda (武田氏館)
- Gratis
- 9:30 ~ 17:00 (lunes cerrado)
Un museo dentro de una reconstrucción de la casa del clan Takeda cuya figura más famosa es Takeda Shingen (1521 – 1573), un señor de la guerra que nació en Hitachinaka. En el salón principal se exponen materiales relacionados con clan, también armaduras y espadas samuráis de la época.
Festividades
Festival de Hitachinaka (ひたちなか祭り)
Es un evento que se celebra anualmente a finales de agosto. Se llevan a cabo diferentes actividades y espectáculos por toda la ciudad como desfiles de baile y carrozas, juegos con agua, concurso de yukatas y espectáculos de música. Su mayor atracción son sus fuegos artificiales.
Dónde comer
El plato típico de esta ciudad es la sopa de rape y otros platos de pescados y mariscos.
► Denmaru: queríamos probar platos típicos de aquí, pero por la hora (todo estaba cerrado) acabamos comiendo en este restaurante de ramen y tsukemen. Yo me pedí por 790 yenes un tsukemen de carne y salsa de soja. Tenía un sabor insípido, como si no llevara nada de sal. No recomiendo este sitio.
Mi viaje
22 de abril de 2024
Hice un viaje de ida y vuelta en coche. Empezamos la mañana en el Parque costero para dedicarle todo el tiempo que quisiéramos. Aunque era lunes no festivo, había muchísima gente. No se podía ni pasear por la colina de las nemophilas, es algo que debéis tener en cuenta si venís aquí. El resto del día lo dedicamos a recorrer algunos de los sitios aquí señalados. Me gustó especialmente el Santuario Hoshiimo porque nunca había visto ninguno igual.
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